¿Sabías que… Richard Nixon hizo de “mula” para Louis Armstrong sin saberlo?
Pue sí, a finales de los años 50, Armstrong, fue nombrado Embajador de Buena Voluntad por el Departamento de Estado de los Estados Unidos. Con tal nombramiento estaba dispensado de tener que pasar por la aduana en los aeropuertos a la vuelta de sus giras por otros continentes. Pero, en el año 1958, tras aterrizar en el aeropuerto de Idlewild en Nueva York, las autoridades policiales le dirigieron hacia la aduana. Parece ser que recibieron un chivatazo sobre la posibilidad de que Armstrong estuviese metiendo algún tipo de contrabando. Pero lo que realmente portaba era 3 libras de marihuana, algo más de un kilo, que consumía regularmente y que describía como “mil veces mejor que el whisky”.
Armstrong estaba pensando en la vergüenza que supondría para su país el descubrimiento de su contrabando de droga cuando, de repente, las puertas se abrieron de par en par y el vicepresidente Richard Nixon, acompañado con su séquito de seguridad, entró en la sala seguido de una nube de reporteros y fotógrafos. Nixon, viendo la oportunidad de una foto con Armstrong, se acercó al jazzista. “Satchmo, ¿qué haces aquí?” preguntó sorprendido Nixon. “Acabo de regresar de mi gira de embajadores de buena voluntad por Asia y me dijeron que tenía que hacer cola en la aduana.” Sin dudarlo, Nixon agarró las dos maletas de Satchmo. “Los embajadores no tienen que pasar por la aduana y el vicepresidente de Estados Unidos con gusto llevará sus maletas por usted”, dijo Nixon. Con lo cual el Vicepresidente introdujo tres libras de marihuana a través de la Aduana de los Estados Unidos sin saberlo.
Posteriormente, Nixon, se enteraría de la historia por boca de Charles McWhorter que era ayudante suyo y que se lo había oído contar a uno de los componentes de la banda de Armstrong.
Esta anécdota se puede leer en el libro titulado Nixon’s Secrets: The Rise, Fall, and Unknown Truth About the President, Watergate, and the Pardon de Roger Stone y Mike Colapietro.
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